¿Por qué cada vez más personas están volviendo al mortero de cal para construir o reformar?

Durante años, el cemento fue el rey indiscutible de la construcción moderna. Rápido, económico, aparentemente infalible. Pero en los últimos tiempos, algo curioso ha ocurrido: arquitectos, restauradores e incluso autoconstructores están recuperando un material tradicional que parecía olvidado: el mortero de cal.

¿La razón? La cal soluciona muchos de los problemas que el cemento ha creado con los años. Problemas de humedad, grietas, falta de transpiración, muros que «no respiran», deterioro en viviendas antiguas…
Hoy te contamos por qué el mortero de cal vuelve con más fuerza que nunca, y por qué tal vez tú también deberías considerarlo.

1. Es transpirable (y tus paredes lo agradecerán)

Una de las mayores ventajas del mortero de cal es su transpirabilidad.
A diferencia del cemento, que sella completamente el muro, la cal permite el intercambio de humedad con el ambiente. Esto ayuda a evitar mohos, malos olores y condensación, creando espacios más sanos y duraderos.

2. Es antifúngico y antibacteriano de forma natural

Gracias a su pH alcalino, la cal actúa como fungicida y desinfectante natural. Ideal para ambientes húmedos o construcciones en contacto con el suelo.
Y sin necesidad de productos químicos añadidos.

3. Es flexible y evita grietas

El cemento es rígido y se agrieta fácilmente por los cambios de temperatura o los pequeños movimientos de la estructura. La cal, en cambio, es más elástica y plástica, lo que le permite adaptarse sin fisuras.
Por eso es el material preferido en restauración de muros antiguos.

4. Es ecológico y reversible

• Su producción requiere menos temperatura que el cemento, lo que significa menor impacto ambiental.
• No contiene aditivos tóxicos ni químicos industriales.
• Y si algún día quieres retirarlo, puedes hacerlo sin dañar el soporte original, algo clave en restauración patrimonial.

5. Puedes usarlo para crear acabados estéticos únicos

Desde texturas rústicas hasta superficies lisas y brillantes, el mortero de cal es muy versátil a nivel decorativo. Puede fratasarse, bruñirse, estucarse o dejarse con acabado natural.
Perfecto para proyectos donde el diseño y lo artesanal van de la mano.

En resumen:

El mortero de cal no es solo un material tradicional. Es una solución moderna, ecológica y eficaz para muchos de los retos actuales en construcción y reforma.
En un momento donde buscamos sostenibilidad, durabilidad y salud, mirar al pasado puede ser el paso más inteligente hacia el futuro.